En la tierra, el 21% del agua dulce proviene de las aguas subterráneas, además con ella se abastece a la tercera parte de la población mundial y es parte de un ciclo hidrológico; o sea, un proceso por debajo del suelo. Por ello, a continuación, descubrirás el origen de las aguas subterráneas y cómo se forman en el planeta.  

¿Cuál es el origen de las aguas subterráneas? 

En gran parte, es producto de la filtración y percolación del agua procedente de la lluvia, la cual puede formar pozos de aguas o acuíferos.  

Estas filtraciones y percolaciones suelen suceder en las formaciones geológicas donde el material del suelo es permeable, como las arenas o piedras, que generalmente, se encuentran cerca de valles o colinas.   

También, su origen se debe a aguas fósiles o congénitas, pues son aquellas conservadas a lo largo del tiempo,  y se encontraban con sedimentos, hasta que estos materiales se transformaron en roca. 

Por último, provienen de aguas juveniles que se encuentran en manantiales cerca de las zonas volcánicas.

¿Cómo se producen las aguas subterráneas? 

La formación de estas aguas se produce de bastante tiempo atrás, ya que las mismas dependen de las formaciones geológicas encontradas en el subsuelo y donde haya material impermeable o semipermeable, capaz de mantener el agua en ese sitio y/o transportarla lentamente. 

Todo esto, gracias al efecto de la presión y de la impermeabilidad que genera el material donde se encuentra hacia alguna laguna o algún manantial.  Estos lugares donde se encuentran estas aguas se les conoce como acuíferos. Además, los acuíferos se clasifican en tres tipos:

1. Acuífero libre: Aquel que se encuentra en contacto con la atmósfera y con la misma presión.

2. Acuífero confinado: Estos se encuentran en rocas impermeables, donde la presión existente es mayor a la atmosférica, pues al extraerla, puede ocasionar algún colapso.

3. Acuíferos semiconfinados: Son los que se encuentran entre rocas semipermeables e impermeables.Por tanto, la formación de aguas subterráneas para el abastecimiento de agua potable es de suma importancia para la humanidad, pues de acuerdo con Organización de las Naciones Unidas- Agua, los países deberán tener una mejor gestión y planificación de este recurso, con la finalidad de tener mayor disponibilidad para su uso agrícola, doméstico, industrial y ambiental.