De principio debemos saber que el agua es inodora, es decir carece de olor, el agua potable y que consumimos no debe tener olor alguno.

Las aguas de pozo son una fuente de agua dulce que proporciona agua higiénica proveniente de las napas subterráneas, pero como ya hemos visto en otros artículos, los acuíferos también pueden ser contaminados debido a la interferencia humana o de la naturaleza. Existen perturbaciones ecológicas que pueden provocar la contaminación del agua y su resultado es el mal olor en el agua. 

Si el agua tiene mal olor, es un indicativo de contaminación por lo que no está apta para el consumo humano. El olor puede ser resultado de materia orgánica en descomposición, actividad microbiana debido a filtraciones de tanques sépticos, gas de sulfuro de hidrógeno disuelto o bacterias reductoras de azufre. Otro motivo puede ser la existencia de gases y minerales naturales.

El agua contaminada puede traer riesgos para la salud por ello es importante hacer las pruebas correspondientes y realizar una desinfección del pozo, a continuación indicaremos algunos métodos para realizarlas.

Cloración

En este método se enjuaga el sistema de agua de pozo como una solución con cloro. El cloro neutraliza el crecimiento de las bacterias y elimina temporalmente los olores provenientes del sulfuro de hidrógeno. Además elimina la acumulación de hierro y manganeso.

Destilación

Consiste en calentar el agua hasta el punto de ebullición y que el vapor se condense. Las altas temperaturas matan los microbios existentes en el agua y eliminan metales pesados y nitratos.

Existen destiladores caseros especiales para este método. Con las unidades de lote se debe introducir el agua en la cámara de ebullición, una vez hervida el agua y evaporada se puede recolectar para su uso.

El otro tipo de unidades de destilación es de flujo continuo, las cuales se conectan directamente a la línea de suministro de agua, destilando automáticamente el agua a medida que se va agotando.

Ozonización

Este método consiste en la esterilización del agua de pozo con gas ozono. La ozonización reduce las concentraciones de hierro, manganeso y azufre del agua; reduce además la presencia del mal olor eliminando bacterias y virus. Para realizar este procedimiento es necesario contar con un equipo generador de ozono.

Osmosis inversa

Este método consiste en procesar el agua y filtrar a presión a través de una membrana semipermeable, permitiendo que el agua pase, pero rechazando las bacterias, toxinas, sales y otros componentes. Para realizar este procedimiento se requiere de procesadores de agua por osmosis inversa.