Los pozos de agua subterráneas están hechos para captar y explotar el recurso de forma vertical. Dentro de los pozos más antiguos usados como fuente de suministro de agua se encuentran los excavados manualmente.

Sin embargo, hoy en día existen diversos tipos de pozos. ¿Conoces cuáles son y sus tipos?

1. Pozos excavados

Para esta construcción se vacía el terreno hasta llegar al nivel del agua subterránea. Está diseñado para aguas poco profundas. Este trabajo se puede realizar de tres formas:

• Manual: se necesita un pico y una pala. El diámetro del pozo debe ser de mínimo 1.5 metros para trabajar cómodamente. La profundidad máxima está determinada por la incapacidad de perforar manualmente las rocas subterráneas.
• Con excavadora: se logra un pozo de diámetro de 2 metros, el cual puede tener una profundidad máxima de 15 metros.
• Con barrena: se puede realizar un pozo de diámetro entre 1.2 – 1.5 metros. La profundidad máxima se encuentra entre los 20 – 30 metros.

2. Pozos hincados

Para este trabajo se utilizan elementos para clavar el suelo verticalmente hasta llegar al nivel del agua subterránea. Existen tres tipos de perforaciones:

• Perforación por percusión: diseñado para aguas poco profundas, este método utiliza un punzón pesado. El diámetro está entre los 25-150 milímetros y puede alcanzar una profundidad máxima de 15-20 metros según la dureza del terreno.
• Perforación por rozado: para aguas poco profundas, se realiza mediante el vaciado de anillos huecos para clavar el suelo. hasta una profundidad máxima de 15 metros.
• Perforación por inyección de agua: diseñado para aguas poco y medianamente profundas. Este método alcanza los 20-40 centímetros de diámetro y una profundidad de 30-40 metros.

3. Perforaciones

Este tipo de pozo capta aguas profundas barrenando con brocas especiales.  Existen dos métodos:

• Por martilleo en fondo de agujero: se utiliza una broca que puede hacer un pozo de diámetro 150-180 milímetros de profundidad máxima de 300 metros.
• Por rotatoria con inyección de agua: utiliza una broca y agua a presión para captar agua a un diámetro de 150-180 milímetros con 200 metros de profundidad máxima.

Para la construcción de pozos de agua subterráneas, se debe hacer la elección teniendo en cuenta criterios técnicos y según datos de la profundidad, datos hidrogeológicos, terreno, costo y velocidad buscada.