Vamos a entender este análisis, como el resultado de estudios geotécnicos entre la relación de fluviometría y pluviometría en una cuenca determinada, los registros que ellas arrojan, el fin es determinar los recursos hídricos disponibles, la que puede ser superficial o subsuperficial. Resumiendo, este estudio va a determinar si existen o no las habilidades, los conocimientos, los equipos, cuál es el coste involucrado en su realización, cuándo, cómo hacerlo y herramientas para llevar a cabo los procedimientos involucrados en el proyecto.

Cuando se refiere a la disponibilidad de aguas subterráneas, estas se diferencian entre captaciones proyectadas y las actualmente en explotación. En el caso de las aguas superficiales, el estudio geotécnico contempla la disposición de vertientes, desagües y/o agua a nivel de predio.

Agua a disposición

Lo primero será tener muy claro lo que nos dice el Código de Aguas, especificando entre superficiales detenidas o corrientes, naturales y artificiales tales como, lagos, pantanos, lagunas, aguadas, estanques, ciénagas o embalses. Luego para analizar hidrológicamente con fines de riego, hay que determinar los caudales en estudio, estos son fuentes con y sin control fluviométrico.

Hay que hacer el proceso de manera prolija y analizar meticulosamente analizados y así no tener inconsistencias en las estadísticas posteriores al estudio geotécnico. Lo primordial será nombrar a un analista a cargo, idóneo y con facultades específicas en el tema hídrico.

Paso a paso, ordenado y eficiente.

Existen tipos de factibilidad, tipo comercial, en este artículo nos referiremos a la operativa, hay que decir que, en casi todas, los procesos son parecidos. Lo primero será tener conocimiento acabado de los aspectos técnicos y posterior, saber precisamente las necesidades que requiere el estudio hidrográfico. El analista a cargo debe presentar un informe con la totalidad de ventajas e inconvenientes.

Solo estudiando la factibilidad lograremos saber lo que se necesita para implementarse, cuales son los recursos disponibles o que debería ampliarse, de ser necesario. Con resultados en mano, se entregarán a la gerencia de la empresa y serán ellos quienes determinarán con los departamentos a cargo, la viabilidad del proyecto y el planning de trabajo.