El transcurso y la década que estamos comenzando son cruciales para el mundo y nuestra permanencia en el, la agenda está tomada por todo lo que rodea a los temas hídricos, de sequias, escasez de alimentos y por supuesto, el gran actor principal, el cambio climático. Una serie de posibles soluciones a corto plazo (2030), puedan ser ejecutadas a bajo o medios costos, los cuales traerán grandes beneficios principalmente ambientales, luego económicos y por tanto sociales.
Muy en simple debemos decir que el gran problema del cambio climático nos afecta directamente en la sequía y sus efectos, sabemos la vitalidad de este recurso natural para mantenernos con vida y buena salud. Pues bien, en nuestros pies y un poco más debajo de ellos, se encuentra la solución, la captación de aguas subterráneas mediante pozos, es una de las más grandes y efectivas soluciones a este gran problema mundial.
Es una salida basada en la naturaleza, específicamente en las rocas del subsuelo que tendrías grandes cantidades de agua para utilizar ya sean en riegos para nuestros cultivos e incluso para dar de beber al ganado e incluso para nosotros mismos. El sistema de purificación y hacerla potable, sin duda va a requerir procedimientos más sofisticados, sin embargo, todos muy posibles y que valen la pena para combatir los efectos del, ya real, cambio climático
El impacto de esta implementación y recuperación de los pozos subterráneos aumentaría la disponibilidad de agua para todos los usos, ayudarían a la regularización de ciclos hídricos y reducirían los costos de consumo, entre otros grandes beneficios.
Este manejo sustentable en base a la restauración de sistemas que el hombre ha usado desde tiempos remotos, contribuiría en un 33% en las estrategias de mitigación y, además, con un costo muy eficiente, esto debido a sus altos beneficios en la crisis climática.